Palabras del expresidente

El jueves 30 se llevó a cabo en la Sede Andrea Vianini, una nueva Asamblea Ordinaria de nuestro Club, en la que fue elegida la conducción para el bienio 2018/2019.

Presidente: Juan Ignacio Mártire

Vicepresidente: Daniel Alegre

Secretario: Nicolás Aiello

Tesorero: Francisco Yantorno

Vocales: Sergio Moretti, Walter Trabucco y Alfredo Yantorno

Suplentes: Luis Hondareyte y Carlos Hidalgo

Revisores de cuentas: Luciano Gauto y Sergio Susman

Comité de ética: Robert Von Kreutzbruck y Cristián Bertschi

Suplente: José Luis Antúnez

En aquella circunstancia dirigí algunas palabras a los presentes, que me gustaría repetir y ampliar. Decir que no fue fácil, pero valió la pena. Que hubo mucha inquietud, mucha ansiedad por conocer cuál sería la recepción que los asociados darían a nuestro plan de labor, cómo sería recibida una u otra iniciativa, si sería o no exitosa, pero al mismo tiempo muchas ganas de que las cosas salieran bien, mucha buena intención y mucho compromiso, y también mucha satisfacción cuando alguien, de repente, te palmeaba la espalda y te decía: “Ché qué bueno estuvo. Gracias!”

Lo que hice y lo que no hice por el Club como su presidente, lo conocen los asociados. Tanto ellos como mis compañeros de gestión se habrán beneficiado de mis aciertos o habrán sufrido el resultado de mis errores. El único logro que quisiera que se reconozca, es haber podido recrear el clima de camaradería y afecto sin el cual ninguna agrupación y no solo nuestro Club, puede subsistir. Pero no lo quiero hacer notar por auto importancia, sino porque es un logro compartido por todos los asociados.

Quizás con algunas cosas que hicimos hayamos dado verdaderamente en el blanco, pero nada hay más verdadero y acertado que el sentimiento de amistad que nos acerca y nos reúne en torno del místico stemma. Ese ambiente agradable y fraternal multiplica infinitamente los saludos, las sonrisas, los innumerables gestos de amistad que vale agradecer.

También quiero expresar mi profundo agradecimiento a todos los que allá hace tiempo, en el 2013, creyeron que mi discurso era sincero, pensaron que se podía y se pusieron a disposición para acompañar el intento de darle a nuestro Club, una nueva vida después de la vida. Todos y cada uno, cada cual a su manera, todos pusieron lo mejor y lo más que pudieron. A todos, sin particularizar y sin hacer ninguna diferencia, a todos les digo: Gracias!

Quisiera augurarle a la nueva Comisión Directiva la mayor suerte en su gestión y todos los éxitos posibles, porque de esos nos beneficiaremos todos los socios. Estos cuatro años me han servido para afirmarme en mi convicción de que la única manera de avanzar es trabajar en un proyecto compartido, porque compartir el esfuerzo le da sentido, y el aporte de cada uno nos constituye a todos. Y porque los logros se disfrutan más cuando son compartidos.

Y para finalizar, permítanme mandarle un saludo personal a Luciano Gauto, Héctor Oliveto, Robert Von Kreutzbruck y Miguel Beruto, para ellos mi mayor respeto, mi aprecio profundo y mi amistad sin reparos.