En 1953 Juan Manuel Fangio corría en Le Mans con un Alfa Romeo 6C 3000 CM Berlinetta. El coche terminaba accidentado, necesitando de cuantiosas reparaciones. Al mismo tiempo, el presidente de Argentina en aquél entonces – Juan Domingo Perón – encargaba a Alfa un 6C 3000 especial. Ya que sólo 6 unidades habían sido producidas con el ánimo de ganar carreras, se empleó como base el 6C 3000 CM Berlinetta de Fangio, que fue enviado al carrocero italiano Carrozeria Boano para convertirlo en un ejemplar único.
Así nacía el único Alfa Romeo Disco Volante Boano, con una carrocería artesanal que reemplazaba el cuerpo Colli que tenía previamente. La inspiración de su carrocería fue el Disco Volante de Touring, y aunque es erróneo llamar Disco Volante al diseño de Mario Boano, es el nombre más comunmente conocido para este fantástico deportivo. La unidad retuvo su motor de seis cilindros en línea, 3.5 litros y 275 CV de potencia, una barbaridad para una época en la que una berlina media rondaba los 50 CV de potencia.
Su segunda vida comenzaba al llegar a Argentina durante los primeros meses de 1955. El coche causó un gran revuelo mediático, ya que fue entregado a Perón por la CGT (Confederación General de Trabajadores), que se rumoreaba fue quien sufragó su coste. Su primera aparición pública fue en el Autódromo de Buenos Aires, donde rodó durante tres vueltas. Sufrió un accidente en Buenos Aires contra un autobús, por fortuna de poca consideración. Fue reparado por Alberto Borghi, un experto que voló desde Italia. A los Socios del Club Alfa Romeo les suena el apellido… se trata del padre de nuestro querido “Tano” Borghi.
En septiembre del mismo año 1955 Perón fue derrocado por la Revolución Libertadora y se exilió en Paraguay. Sus propiedades fueron confiscadas y subastadas. Entre su nutrido parque automovilístico – Perón era todo un adicto al automóvil – se contaban máquinas como un Ferrari 212 Inter Ghia, un Alfa Romeo 1900 CSS Touring o Giulietta Sprint. El Alfa Romeo de Perón cambia de manos al menos tres veces, y recibe cambios estéticos menores, posiblemente llevados a cabo por Borghi.
En 1968 el Alfa Romeo sale de Argentina, con rumbo a Estados Unidos. Fue vendido por sólamente 10.500$ a Ed Bond, que en 1970 lo revende a su actual dueño, Henry W. Wessells III. Mr. Wessells compite en diversas competiciones de clásicos, hasta que en 1984, ocurre otra tragedia. Durante el Pittsburgh Vintage Grand Prix, Wessells se sale de pista y choca contra unos árboles. El choque deja el coche totalmente destrozado, prácticamente sin posibilidades de reparación.
No obstante, envía el chasis y motor a Hall & Fowler en Gran Bretaña y encarga a Carrozzeria Diamond en Turín la construcción de una nueva carrocería, réplica de la carrocería Colli con la que este clásico compitió en 1953. El coche vive actualmente su tercera vida de manera muy parecida a su estado original, llegando incluso a competir en eventos como Le Mans Classic. Lo que es seguro es que pocos coches tendrán una historia tan llamativa y peculiar como este Alfa Romeo de Boano.
Fuente: Sergio Álvarez | Via Retro | Ultimate Car Page
2 comments
una obra de arte, una belleza creada por el hombre!
Cuando luego de la Revolucion Libertadora se remataron los bienes encontrados en la residencia de Peron (donde hoy esta la Biblioteca Nacional) este hermoso y raro Alfa Romeo fue adquirido por el Sr. Raul Decker y resguardado en su residencia de la calle Arcos (actual embajada de Mexico)…..