El mercado de automóviles está vinculado muy fuertemente al marketing y la capacidad de las empresas para crear una marca fuerte y reconocible. Un ejemplo de esto es la noticia que circula por los diferentes medios especializados y que sorprende a muchos alfistas. Según esos rumores Audi estaría cerca de llegar a un acuerdo con FCA para lograr que se le concedan las marcas Q2 y Q4 que, hasta la fecha, pertenecen a Alfa Romeo y Maserati.

Desde que la marca teutona incursionó en el mercado de las SUV con su denominación donde la clásica “A” que antecede el numero indicador del segmento es remplazada por la “Q” que Audi relaciona a su sistema de tracción inexplicablemente expresado con la palabra italiana “quattro” (será que hay que pretender ser italiano para ostentar deportividad).

En los próximos años, los grises tanques alemanes incorporarán nuevos soldados a sus filas, que por decisiones obvias deberían denominarse “Q2” y “Q4” en consonancia con el resto de la gama. Estas dos marcas, sin embargo, pertenecen respectivamente a Alfa Romeo, que en el pasado ha utilizado el término Q2 para indicar su sistema de diferencial delantero y Q4 para sus sistema de tracción integral estrenado en el Alfa 155 en 1994 y que también implementó en los Alfa 33 y 164, la 156 SW y la familia 159. Maserati también que utiliza el Q4 en la Ghibli S Q4, Quattroporte S Q4.

Se estima que FCA accederá al pedido de Audi a cambio de un monto importante aunque la cifra aún no se conoce y es difícil poner precio a un pedazo de historia de Alfa Romeo.